Blue Lab Beats, de lo que pudo haber sido y no fue

El dúo británico Blue Lab Beats es una de las formaciones punteras de la pujante escena jazzística británica, que es tanto como decir europea (si me pongo un tanto hiperbólico diría que mundial).

Desde que conocimos a esta banda hemos procurado seguirle la pista a NK OK (Namali Kwaten) y a MR DM (David Mrakpor) en sus anares discográficos y hay que decir que no nos habían defraudado hasta el momento.

Así que nos de extrañar que estuviésemos emocionados por verles y oírles desde que se confirmó su presencia en el 58 Donostiako Jazzaldia.

NK OK (Namali Kwaten).

Y aunque nuestro gozo no se ha hundido en un pozo, lo cierto es que Blue Lab Beats no estuvieron a la altura de lo que ellos se podía esperar.

Igual fue el escenario que les vino grande, igual fue el planteamiento del concierto, igual fue que el ánimo de este cronista no estaba para florituras, pero lo innegable es que las expectativas creadas no fueron satisfechas.

El concierto fue de menos a más, pero les faltó chispa para convertir su música en un fiesta para los sentidos.

MR DM (David Mrakpor).

NK OK se erigió en el maestro de ceremonias, por así decir, y fue él quien más interaccionó con el público y quien protagonizó alguno de los mejores momentos de la tyarde/noche, mientras que MR DM ocupó un discreto segundo plano.

A lo largo de su actuación salieron a escena los músicos que les acompañan en esta gira, y mientras que Poppy Daniels a la trompeta y Ben Vize al saxo tenor hizieron un buen trabajo, la cantante Natalie Lindi no fue capaz, o no pudo, mejorar lo que había ya en el escenario.

Pero seguro que Blue Lab Beats va a mejorar en los dos conciertos que aún tiene programados en el 58 Jazzaldia.

Esta actuación nos vuelve a enseñar que nunca hay que crearse excesivas expectativas, más que nada para no salir decepcionados de la experiencia, y que hay grupos que funcionan mejor en disco que en directo.